Por ejemplo Seat no vende automóviles, sino medios de transporte.
Para el marketing es de vital importancia ya que si no se dispone del producto adecuado para estimular la demanda, no es posible llevar a cabo de modo efectivo ninguna otra acción comercial. Es por ello que el punto de partida de la estrategia comercial es la política de producto cuya finalidad es proporcionar el producto que mejor se adapte a las necesidades del consumidor.
Por ejemplo, el fundado de Revlon afirma que "en la fábrica hacemos cosméticos, pero en la tienda vendemos esperanzas"
Es por ello que es necesario analizar el producto en términos de potencialidad. Analizarlo no por lo que es, sino por lo que puede llegar a ser.