viernes, 14 de octubre de 2016

Halloween, el marketing más recomendable de octubre



Llega el mes de octubre y eso significa una cosa para las empresas y negocios: Halloween. El día 31 de octubre es la noche de Halloween, el día de los difuntos tal y como se le conocía en el pasado, una ocasión idónea para sacar a relucir las mejores técnicas de marketing. Lo que para algunos es un pretexto por el cual hacer negocio, para la mayor parte de empresas debe ser una oportunidad con la cual aumentar ventas, beneficios y publicidad. ¿Pero cómo lograrlo?




Hay que impregnarse del espíritu


Tal y como hacemos en Navidad, una fecha mucho más establecida, lo que debemos hacer con la celebración de Halloween es dejar que su espíritu nos impregne. Si bien en los últimos años todavía no se ha visto una gran implementación de esta fiesta entre los negocios, 2016 se está perfilando como el año en el que despuntará finalmente. Y eso significa que o lo celebramos o nos quedamos atrás en cuanto a la imagen que proporcionamos a nuestros clientes y socios. Tengamos en cuenta que la noche de Halloween, el 31, es cuando termina todo. Por ello la campaña tendrá que comenzar a contar alrededor de una semana antes de esta noche y luego estar terminada para el 1 de noviembre.

Recomendaciones


Halloween es, como otras fiestas globales, muy fácil de identificar y organizar. Lo primero que debemos hacer es decorar nuestro negocio de una manera terrorífica. No pensemos que es algo raro o poco correcto, dado que se hace ya de forma habitual entre todo tipo de empresas. Los restaurantes, por ejemplo, llevan varios años aprovechando Halloween para atraer a la clientela de una forma novedosa y original. Para la decoración podemos optar por telas de araña, manchas de sangre, fantasmas y cualquier otro adorno. Se venden en tiendas de fiestas y están muy instaurados, así que no es difícil encontrarlos.

Aunque durante la semana previa a la noche de Halloween no resulta necesario, en Halloween sí que es recomendable expandir el espíritu de la festividad entre los miembros de la empresa o negocio. Que se disfracen es lo mejor que pueden hacer para dar salida al espíritu terrorífico que merece esta fecha. Es algo que agradecerán los clientes, especialmente si se trata de un lugar público.

Por otro lado, no olvidemos tener caramelos de sobra en nuestro negocio, dado que nunca se sabe cuándo podrán entrar niños (o no tan niños) pensando en plantearnos la oferta del truco o trato. Mejor que sea trato y nunca truco.