Dentro de las empresas, la influencia que estas pueden tener
sobre sus trabajadores en muchas ocasiones puede ser increíble. No es de
extrañar ya que gran parte de las horas de su día las pasan dentro del entorno
laboral.
Por eso y dentro de los planes de incentivos, pero también de riesgos
laborales, se puede apostar por
estrategias de hábitos saludables para mantener la motivación de nuestros
empleados.
Como en otras ocasiones hemos discutido, resulta interesante
que los trabajadores se sientan identificados con los valores de la empresa, un buen lugar para iniciar o tal vez para
continuar con esta identificación y motivación por formar parte como trabajador
de la empresa, podrían ser estas promociones de los hábitos saludables. Ejemplos:
- Apoyo para dejar de fumar. Si desde el mismo entorno laboral se bombardea a los empleados sobre los problemas que causa fumar, se puede conseguir mucho, pero si además se acompaña con campañas antitabaco, mejor aún. Pensemos en una empresa que dentro del servicio médico incluya la posibilidad de recibir un tratamiento para ayudarle a dejar de fumar.
- Fruta para cada empleado. Para evitar que, durante su jornada laboral, la primera opción de desayuno sea bollería, la empresa puede optar por preparar fruta para cada empleado. En las empresas con pocos trabajadores se podrá incluso plantear la posibilidad de que esta se personalice a la persona.
- Organizar grupos de running o senderismo. Los hábitos saludables se pueden promocionar dentro de la oficina, pero también fuera de esta con determinadas actividades, por lo que los trabajadores pueden sentirse motivados y decidirse a practicar algo más de deporte del que ya practicaban.
Son tan solo algunos
ejemplos que sin duda dentro de los departamentos de comunicación interna y
recursos humanos podrían ser desarrollados más en profundidad.