miércoles, 3 de agosto de 2016

¿Realmente supone un beneficio para tu empresa reivindicar la marca España?



Las estrategias de marketing en una empresa son muy variadas, pero todas cuentan con el mismo objetivo, aumentar las ganancias de la empresa, sumado, en la mayoría de casos a una mayor visibilidad de la misma.
La marca España es uno de los muchos recursos que, tanto a nivel estatal como particular, se intenta poner en marcha para conseguir atraer tanto a los consumidores internacionales como nacionales.

Pero, ¿es una ventaja real dar valor al origen español de los productos?

El pasado mes de mayo, el conglomerado empresarial de información y medios, Nielsen, lanzó un nuevo informe con datos a destacar relativos al gusto de los usuarios por el origen español de los productos.
Si eres una empresa proveedora de alimentos frescos estás de suerte, 7 de cada 10 españoles prefieren que por ejemplo la fruta, provenga de nuestro país. Si tu empresa publicita su procedencia, tendrá el 70% más de posibilidades de ser la elegida con respecto a una marca extranjera.
Además, para el 44% de los encuestados, lo fabricado a nivel local aporta mayor confianza que lo extranjero.


Si por el contrario tu empresa se sitúa en el sector del cuidado personal y las bebidas, la marca España parece ser tenida menos en cuenta, sólo entre un 20 y un 30% le da valor, y competir en procedencia puede no ser estadísticamente, la estrategia más adecuada en estos casos.



Compitiendo con las marcas internacionales

Para las empresas locales estos datos son un reto, ya que algo tan aparentemente sencillo como dar mayor visibilidad al origen del producto puede adelantarlos por encima de empresas mayores. Sin embargo, con esto no se consigue directamente el éxito. Desde Nilsen recomiendan que para una competencia real con marcas globales es necesario una mayor inversión en I+D+i de las pequeñas empresas, no sólo con nuevas ideas sino apostando por el talento del capital humano, capaces de enfatizar su mejor conocimiento del consumidor local, que lucha entre el sentimiento de apego hacia la marca nacional y su creencia de que la marca internacional le dará algo más novedoso.